Cuando sienten y admiten nuestro desprecio es cuando reconocen nuestra venganza.
ANTERIORES
El soporte de la ética es la buena conciencia.
Con frecuencia requerimos de un masaje al ego para continuar la marcha.
El hombre no tiene remedio mientras posea un corazón.
Claro que las acciones del hombre tienden siempre a corporizar su alma.
Es duro tener que aceptar que la calidad de la vida de uno depende del capricho de los demás.
Tiene más fuerza en cualquier situación humana la convicción que la razón.
Para el solitario empedernido, convivir es como vivir a medias.
Si se quiere detectar a un hombre solitario hay que observarle su constante vacilación.
El hombre solitario intuye con mayor facilidad la muerte.
Así como algunas personas se reclinan cómodamente en el papel de enfermos, ciertos solitarios logran hacer de su soledad una muelle poltrona.