¿Abusamos del WhatsApp?

si damos por buenas las cifras que de manera más o menos oficial figuran en Internet, es evidente que con el WhatsApp se nos está yendo la mano a casi todos. En la actualidad, se estima que somos unos 500 millones los usuarios que manejamos esta aplicación y recientemente batimos el récord de mensajes enviados en un día hasta llegar a la cifra de 54.000 millones, lo que da una media de más de 100 por cabeza. Pero no nos conformamos con esta burrada de actividad cibernética. Además, cada 24 horas nos enviamos en torno a 700 millones de fotos y 100 millones de vídeos. No extraña, por lo tanto, que nos hayamos acostumbrado tanto al pitido que suena en la mayoría de smart-phones cada vez que llega un nuevo mensaje que ya ni lo escuchamos. Y, lo que es peor, con frecuencia ni los leemos por imposibilidad de mirar las decenas y decenas de hilos que recibimos de distintos remitentes. Bien utilizado, el guasap iba a jubilar a los SMS, pero ahora resulta que cuando se quiere tener la certeza de que el destinatario ha de enterarse de lo que le pretendemos comunicar, no nos queda otra que pasar por taquilla y regresar a los tradicionales SMS. Si seguimos así, mucho me temo que el WhatsApp va a morir de éxito.

Por Javier Encinas

 

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