Fragmentos de la novela Fahrenheit 451 de Ray Bradbury.


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Publicado por
@MUJERNET

11/02/2015#N51506

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“Los libros están para recordarnos lo tontos y estúpidos que somos. Son la guardia pretoriana de César, susurrando mientras tiene lugar el desfile por la avenida: “Recuerda, César, que eres mortal”. La mayoría de nosotros no podemos andar corriendo por ahí, hablando con todo el mundo, ni conocer todas las ciudades del mundo, pues carecemos de tiempo, de dinero o de amigos. Lo que usted anda buscando, Montag, está en el mundo, pero el único medio para que una persona corriente vea el noventa y nueve por ciento de ello está en un libro. No pido garantías. Y no espero ser salvado por alguna cosa, persona o máquina o biblioteca. Realice su propia labor salvadora, y si se ahoga, muera, por lo menos, sabiendo que se dirigía hacia la playa”. (Faber, p. 96)

Fahrenheit 451 de Ray Bradbury. Editorial Sudamericana S. A., Bs. As., 2011)

 

Comentarios

@VIVIANSIL

11/02/2015



Hermoso fragmento.

Realmente los libros nos abren hacia otros mundos posibles.

Gracias por subirlo.

 

Viviana.  
@MUJERNET

11/02/2015



Gracias Viviana.   
@MUJERNET

11/02/2015



Gracias y tomo la recomendación. Raquel  
@MUJERNET

12/02/2015

Si, tal cual. Me recordaste este fragmento“¿Qué es más fácil de explicar y más lógico? Como las universidades producían más corredores, saltadores, boxeadores, aviadores y nadadores, en vez de profesores, críticos, sabios y creadores, la palabra “intelectual”, claro está, se convirtió en el insulto que merecía ser. Siempre se teme a lo desconocido. Sin duda, te acordarás del muchacho de tu clase que era excepcionalmente “inteligente”, que recitaba la mayoría de las lecciones y daba las respuestas, en tanto que los demás permanecían como muñecos de barro, y le detestaban. ¿Y no era ese muchacho inteligente al que escogían para pegar y atormentar después de las horas de clase? Desde luego que sí. Hemos de ser todos iguales. No todos nacemos libres e iguales, como dice la Constitución, sino todos hechos iguales. Cada hombre, la imagen de cualquier otro. Entonces, todos son felices, porque no pueden establecerse diferencias ni comparaciones desfavorables. ¡Ea! Un libro es un arma cargada en la casa de al lado. Quémalo. Quita el proyectil del arma. Domina la mente del hombre. ¿Quién sabe cuál podría ser el objetivo del hombre que leyese mucho? ¿Yo? No los resistiría ni un minuto. Y así, cuando, por último, las casas fueron completamente inmunizadas contra el fuego en el mundo entero… ya no hubo necesidad de bomberos para el antiguo trabajo. Se les dio una nueva misión, como custodios de nuestra tranquilidad de espíritu, de nuestro pequeño, comprensible y justo temor de ser inferiores”. (Beathy a Montag, p. 68)  
@MARCELO65

12/02/2015



Hermosa novela, igual el Bradbury cuentista es genial...  
@KUKITYTA

12/02/2015



Admiro la gente que tiene buena memoria, la mia es tan, pero tan mala que soy capáz de leer el mismo libro varias veces y darme cuenta casi al final. No crean que esos son solo desventajas, también tiene sus beneficios, me vuelvo a sorprender con las mismas cosas una y otra vez, como esa chica que cada día despertaba habiendo olvidado lo vivido el día anterior. Por eso, por mi dificultad para el recuerdo, mientras leo disfruto enórmemente de la lectura, y depsués atesoro sensaciones. Ese libro me transporta irremediablemente a mi adolescencia, a un profesor de física que dedicaba 1/3 de las horas a introducirnos en la lectura de la ciencia ficción (y les aseguro que fue una de las materias que más aprendí y disfruté de la secundaria), hábito que me duró hasta finalizarla, leyendo todos los libros disponibles en la biblioteca mas los que compraba cuando podía. Asi que para mi Farenheit, Ray Bradbury, Artur Clarck y tantos otros, serán siempre además de buenos autores, mis inseparables compañeros de secundaria.

Ruth  
@MUJERNET

14/02/2015



Si, Marcelo, es cierto, la escritura de Bradbury es fantástica. Al igual que a Ruth. este cuentista como muchos otros poblaron mi imaginación desde mi adolescencia. Tal vez no tenga nada que ver pero Ruth, en tu comentario hay escondido una muy buena historia para convertir en cuento. Raquel