Despues de los 40 Reflexiones y ponerlas en practica


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Publicado por
@JERNEJA

09/08/2005#N6350

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Según el destacado científico social la segunda mitad de
la vida puede ser mejor que la primera. Para que ello suceda hay que
tener en cuenta una serie de recomendaciones que el profesor formula en
su exitoso libro con base en investigaciones profundas sobre la conducta,
los hábitos de vida y la felicidad de quienes ya tienen arrugas y canas.

Resumimos y comentamos algunas de esas sugerencias, las que
más nos llamaron la atención:

* La felicidad no es un accidente. Se puede aumentar si uno
toma conciencia de lo que está haciendo y de lo que está dejando de hacer,
y asume el compromiso de cambiar lo que no le gusta.

* Hay que intentar siempre hacer cosas nuevas. Las personas
que viven en la rutina son 26 por ciento menos optimistas sobre su futuro
cuando se les compara con quienes están constantemente haciendo pequeñas o
grandes innovaciones en su vida.

* Disfrute las muchas cosas bellas que hay a su alrededor:
un amanecer, una flor, una obra de arte, una pieza musical, una buena
jugada en el fútbol, la sonrisa de un extraño, la ternura de un bebé ó el
regreso a casa, son apenas unos pocos ejemplos de las muchas cosas
maravillosas que a diario suceden y que no gozamos a plenitud.

* Nunca se jubile. Las personas activas sufren de depresión
y otras enfermedades en menor proporción que los que poco o nada hacen.
Mantener la mente y el cuerpo en acción es la mejor manera de conservar un
espíritu joven.

* Exprese su propia personalidad. Haga lo que haga, después
de los 40 años es necesario que lo haga con su propio estilo, con su
propia voz, dejando siempre su huella personal en cada paso.

* Mantenga sus temores a raya. Imaginarse problemas
futuros, preocuparse más de la cuenta, vivir asustado, es la mejor manera
de amargarse la vida. Hay que procurar mantener la mente despejada y
fresca el alma.

* Los días por venir pueden ser mejores que los días del
pasado. Entre más credibilidad tenga este planteamiento, mayor es la
probabilidad de que este deseo se materialice. Porque hay múltiples
evidencias que demuestran que mucho de lo que nos sucede es producto de la
actitud que tengamos frente a la vida.

* No se aisle, sea abierto, sea receptivo, involúcrese con
mucha gente, interésese en sus vidas. Así descubrirá aficiones comunes,
experiencias enriquecedoras y compañía en los momentos difíciles.
Marginarse de la familia o de la sociedad es una forma de acelerar el
envejecimiento del corazón.

* Hay que ver lo bueno, no sólo lo malo de las
transiciones. Después de los 40 se presentan cambios duros de aceptar,
pero en muchos casos esos cambios tienen un componente positivo -se abren
puertas a nuevas posibilidades.

* Disfrute la naturaleza. Salir al campo es muy saludable
para el cuerpo, la mente, el espíritu y el corazón. Por esas cosas mágicas
de la vida, la belleza de lo natural inspira, relaja y distrae.

* Reconozca que la vida en muchos frentes se descomplica.
Es cierto que para algunas cosas ser joven trae sus ventajas, pero también
es verdad que para muchas otras tener cierta edad implica alivio. El 60
por ciento de la gente mayor de 50 años afirma que siente menos estrés,
menos ansiedad y más aprecio por la vida que cuando tenían 10 ó 20 años
menos.

* Haga trabajo voluntario. Ayudarle a personas necesitadas
no sólo es una noble causa, sino un gran remedio para tensiones propias.
Quienes ayudan al prójimo que sufre registran 72 por ciento más de
satisfacción con la vida, que quienes no lo hacen.

* Nunca se rinda. Sea lo que sea, pase lo que pase,
simplemente nunca se rinda.

* En la medida de lo posible camine, no use su carro.
Estudios demuestran que las personas que se desplazan a pie tienen menores
niveles de estrés que los que recorren trayectos similares en vehículos.

* Comparta lo que sabe. En la primera mitad de la vida se
acumulan abundantes y valiosos conocimientos. Enseñarle a otra persona lo
que se ha aprendido es una forma de contribuir a su mejor futuro. Y es una
manera de aumentar la autoestima y la sensación de haber vivido una vida
interesante.

* No se guarde sus problemas. Contarle sus dificultades a
amigos y familiares, sin convertirse en una carga, es una fórmula efectiva
para aliviar presiones nocivas. Los adultos jóvenes, por orgullo, se
tragan sus preocupaciones, lo cual produce una gran indisgestión
emocional.

* Convierta su hogar en un paraíso. Haga todo lo posible
porque su casa sea un sitio ideal: espacio para el descanso, el
entretenimiento, una vida familiar estrecha, fuente de tranquilidad, lugar
para desarrollar sus pasatiempos, un remanso de paz. Esto le ayudará a
aliviar más fácilmente las hostilidades del mundo externo.

* Perdone. Pensamos que perdonar es algo que hacemos a
favor de quienes nos ofenden, pero en realidad el principal beneficiario
del perdón es quien lo da, porque descarga su rabia y su dolor. Perdonar
no es un signo de debilidad sino de fortaleza. Ensaye a perdonar y verá
cuánto gana.

* Asegúrese de que sus alegrías sean más ruidosas y más
frecuentes que sus irritaciones.

* Vaya más allá de los formalismos. A partir de cierta
edad, para realmente aprovechar las relaciones interpersonales hay que
olvidarse de los títulos, de las cuentas bancarias y de los apellidos
ilustres, para concentrarse en la esencia de los seres humanos. Así es que
se descubren las verdaderas joyas que son las que en realidad alegran la
vida.

* Haga ejercicio. Practicar ejercicio al menos media hora
diaria es fundamental para conservar no sólo la buena salud física sino la
mental. Investigaciones comprueban que el principal beneficio del deporte
frecuente es de naturaleza sicológica, más que física. Es además, una
manera eficaz de despejar los nubarrones y las telarañas que se posan
sobre las cabezas sedentarias.

* Tenga amigos muy cercanos. La gente que tiene buenos
amigos logra niveles de satisfacción con su vida 19 por ciento superiores
al que tienen los 'llaneros solitarios'. Y son 23 por ciento más
optimistas.

* Vuélvase un niño. En lo posible, y sin exagerar, trate de
mantener sanas actitudes infantiles: curiosidad, vitalidad, capacidad de
reírse con facilidad, gusto por los juegos, sinceridad y un sentido de
liviandad.

* Escuche música todo el día. La música produce espléndidos
efectos positivos en todas las dimensiones del ser humano. Para trabajar,
para leer, para cenar, para cantar, para estudiar, para soñar, etc., la
música es una compañía perfecta.

 

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