L E O N E S.-

Ella es una mujer solitaria de apenas cuarenta y algo muy bien llevados, medianamente atractiva, pero su belleza no estiba en lo físico sino en la enorme calidad humana.
Independiente, profesional, sola sin hijos, con una historia muy triste de desencuentros y sinsabores que la templaron como el acero.
Se refugio en su soledad mas para evitar el dolor de nuevos fracasos, que por el deseo de estar sola y volver a enamorarse. Aguda con una inteligencia emocional muy dotada.
Y una personalidad ágil y culta. Sin mascotas, con un circulo de familia del tamaño de una cabina de locutorio telefónico.
Estaba en una página de encuentros pero su paladar negro le filtraba el enorme caudal de hombres que frecuentaba las ciber relaciones. Desde hacia largo tiempo.

El un divorciado con un hijo ya grande, un matrimonio extenso denso y minado de actitudes enfermas de su ex mujer. Una delirante de característica manipuladora y groseramente al borde del escándalo. Que hizo que el se creyera mucha mentira sobre si mismo, de falsedades he injurias infundadas. Pero tanto se miente que algo siempre queda. El un León herido, que Ella iba a curar con lentitud pero sin pausa.

Se conocieron en una salida grupal, y fue instantáneo para ella. El se sumo por accidente a una salida la próxima en la que se vieron tomo su mano y jamás la soltó otra vez. Ambos parecen dos gotas de agua. Y ambos se diferencian bastante uno del otro.
Ella debe sofocar el maltrato al que fue objeto El. Y El debe contener las dudas y los miedos de Ella, su temor a caer otra vez en un nuevo fracaso.
Van muy rápido pero hay algo entre ellos que tiene ese no se que, ese que se yo.
Que los impulsa los renueva y los fortalece. Ojala esta vez se encuentren por mucho pero mucho tiempo. Y si no es así ambos saldrán mejor de cómo estaban antes de conocerse y de intentar una nueva historia de amor en nuestra city porteña

 

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