EL HOMBRE Y LA RELIGION


Registrate en Encontrarse y empezá a conocer gente ya

Publicado por
@DANTEX

11/09/2019#N70483

0 Actividad semanal
560 Visitas totales


Registrate en Encontrarse y empezá a conocer gente ya
Extracto de” Fragmentos de una enseñanza desconocida” de P. Ouspensky.

Hay que comprender que la religión del hombre Nº 1 no es la religión del hombre Nº 2, y que la del hombre Nº 3 es todavía otra religión. Asimismo, las religiones de los hombres Nº 4, Nº 5, Nº 6 y Nº 7 son enteramente diferentes de las religiones de los hombres números 1, 2 y 3. En segundo lugar, la religión es: hacer. Un hombre no solamente piensa o siente su religión, él la «vive» tanto como puede; de otro modo no es religión sino fantasía o filosofía. Quiéralo o no, muestra su actitud hacia su religión por sus actos, y no puede mostrarla sino por sus actos. Por lo tanto, si sus actos son contradictorios a lo que su religión le pide, él no puede afirmar que pertenece a esta religión. La gran mayoría de las personas que se llaman cristianas no tienen derecho a este título, pues no solamente no siguen los mandamientos de su religión, sino que ni siquiera parecen sospechar que estos mandamientos deben ser acatados. La religión cristiana prohíbe el asesinato. Y todos los progresos que hemos hecho son progresos en la técnica del asesinato, en el arte de la guerra. ¿Cómo podemos llamarnos Cristianos?
Nadie tiene derecho a llamarse Cristiano, si no cumple en su vida con los preceptos de Cristo. Un hombre puede decir que él desea ser Cristiano, si se esfuerza por cumplir estos preceptos. Si él ni siquiera piensa en ellos, o si se ríe de ellos, o si los reemplaza por cualquier cosa de su invención, o simplemente si los olvida, no tiene ningún derecho de llamarse Cristiano.
He tomado el ejemplo de la guerra, porque es el más impresionante. Pero sin hablar de la guerra, todo en nuestra vida es exactamente del mismo orden. La gente se llama Cristiana, pero sin comprender que no lo quiere ser, que no lo puede ser, porque para ser Cristiano no es suficiente desearlo, hay que ser capaz de serlo.

 

Comentarios

Aún no hay comentarios. Iniciá una conversación acerca de este tema.